El aula de los goles V: HABÍA QUE GANAR “POR NARICES”

Creado: Miércoles, 13 Noviembre 2013 12:29

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El domingo 9 del presente mes de noviembre, el Sta. Teresa juvenil venció al Oviedo 06 por dos goles a cero.

La alineación titular fue: Tejada, Garci, Cañal, Fernando, Chusi, Alba, Berto, Javi, Tejido, Gálvez y Prendes. En el banquillo: Eloy, Alex, Fidi y Román.

El partido comenzó a las doce y durante el primer tiempo se convirtió en un correcalles con poco fútbol. No había un claro dominador. El cronómetro indicaba que ya se había jugado durante media hora, cuando Gálvez recibió un balón en profundidad.  Se internó en el área y disparó. El balón fue rechazado por un defensa y volvió a nuestro delantero, que llegó a la línea de fondo y dio un buen “pase de la muerte”, que fue rematado por Prendes al fondo de la red. El resto de este primer periodo siguió igual. En el último minuto llegó la jugada desafortunada del partido. Cañal corta perfectamente el avance de un delantero del 06, como lleva haciendo todo el año. El contrario de forma “sospechosa” le golpeó en la cara y lo lesionó. El delantero creyó que no había hecho nada  (actitud excesivamente habitual en el fútbol) y el árbitro, ¡ay el árbitro!  Lleno de buena voluntad se interesó por el estado físico de... ¿Saben ustedes de quién? ¡Del delantero! Todo un detalle de filantropía. Por cierto, el “pitero” ni se dignó en pitar falta. Lo hizo en la continuación de la jugada por una dura entrada a Tejido. Pero no le sacó tarjeta (a Tejido, me refiero). Así acabó el primer tiempo, todos al vestuario y nuestro central al hospital donde le colocaron bien el tabique nasal. Señor colegiado, usted no pitó nada.  

Tras el descanso, dos cambios: Fidi por Cañal y Román por Prendes, quien dejó el partido por no encontrarse bien. La segunda parte fue otra historia, aunque al poco de empezar casi perdemos a un segundo jugador, cuando Chusi en un salto de cabeza fue desequilibrado por el contrario y al caerse se hizo daño en el brazo. Y el árbitro, ¡ay el árbitro! El partido cambió. Nuestro equipo tuvo las mejores ocasiones y jugó por momentos muy bien. En una de esas jugadas Gálvez quedó solo ante el portero y marcó el segundo de tiro raso. Antes Alba había fallado una clara ocasión en una gran jugada de Berto, que había aguantado muy bien el balón y se lo pasó entre el portero y los defensas al segundo palo. Llegaron otros cambios, Eloy por Garci y unos minutos después Álex por Fernando (buen partido jugando por primera vez como central). En los minutos finales Javi, que no tuvo su día de cara al gol, falló varias ocasiones y en el último suspiro Tejido llegó por la línea de fondo y decidió jugársela, enviando el balón al palo, en lugar de cederla atrás. Tejada tuvo un día relativamente tranquilo. Aunque sacó muchas veces de puerta, no intervino en muchas ocasiones, y cuando lo hizo estuvo muy bien (paradón con el pie a lo Casillas).

En fin, dos mitades muy distintas y un equipo que fue de menos a más. Y es que tras lo ocurrido al final del primer tiempo, había que ganar “por narices” en honor al señor Cañal (al que le deseamos una pronta recuperación). ¡Ánimo, chaval!

Crónica de Jesús Manuel Prado Lafuente