El aula de los goles XVII: A VECES, QUIEN LA SIGUE LA CONSIGUE.

Creado: Miércoles, 05 Marzo 2014 12:29

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Tras perder la semana pasada de manera injusta en La Fresneda, el Sta. Teresa juvenil recibió ayer la visita en La Pixarra del Grujoan. El partido finalizó con un apretadísimo 2 a 1 a favor de los locales.

La alineación titular fue: Tejada, Garci, Cañal, Fidi, Chusi, Alba, Berto, Pimentel, Tejido, Valentín y Prendes. En el banquillo: Javi y Fernando.

En un campo que comenzó medio inundado y terminó anegado por completo, se disputó el sábado 1 del tercer mes del año en curso el partido entre nuestros juveniles y el Grujoan. ¡Qué manera de llover!, en especial en la segunda parte. Minutos antes del comienzo de este partido el infantil teresiano había sufrido las inclemencias del tiempo ante Los Arcos. Digno partido de los chavalinos en un partido sobre un terreno muy complicado para ellos.

A las cinco dio comienzo el encuentro de los juveniles. Desde el principio se vio que iba a ser un partido disputado, de lucha, de entrega por parte y parte. En la primera parte no hubo muchas ocasiones. Varios disparos de los nuestros por parte de Prendes, Tejido o Berto a los que siempre respondió el portero visitante. Por su parte nuestra defensa (Cañal y Fidi se mostraron expeditivos todo el partido) y portero tuvieron que emplearse a fondo en algún lance como aquel en el que Chusi sacó un balón en la misma línea de gol. Este mismo jugador marcó un gol en los minutos finales de la primera parte, tras sendos remates de Prendes, al poste, y Alba, salvado por el portero. Pero el árbitro lo anuló por fuera de juego. Tras el partido, en zona mixta, el lateral comentaba que había más de dos jugadores entre él y la línea de puerta, lo que anularía el fuera de juego. En fin, la primera parte finalizó con un justo empate a cero. La lucha de los dos equipos lo merecía.

Durante la segunda parte Javi entró por Valentín y minutos después Fernando por Garci. Los dos jugadores que salían habían derrochado esfuerzo y entrega sin límites y los dos que entraron les tocó nadar en una banda totalmente anegada. El equipo visitante dominaba el juego, pero Tejido metió un pase magistral entre los dos centrales contrarios y por allí apareció Pimentel que con un toque sutil (que firmaría el mismo Jesé) superó al portero rival. Teresianas se adelantaba en el marcador. Jugadón magistral sobre un campo que se estaba convirtiendo en una piscina.

El Grujoan seguía dominando y a falta de veinte minutos un centrocampista visitante controla el balón con la mano y lanza un derechazo espectacular desde treinta metros que pega en el larguero y entra (este lo firmaría Bale). Espectacular. Pero tengamos en cuenta que el viento era a favor.

Los visitantes siguieron dominando. Sin embargo, tras el lanzamiento de una falta Prendes anotaba el que pudo haber sido el segundo, pero el árbitro lo anuló por fuera de juego. Tras el saque de la falta algún delantero había tocado el balón con la cabeza, y eso propició la situación antirreglamentaria de nuestro delantero. Una pena. Era un golazo. Poco después Javi recibió una dura entrada dentro del área y… penalti. Tejido lanzó y falló. ¿No me creen? Pues sí. Alguno tenía que fallar. Un detalle: el árbitro se empeñó en tocar el balón para colocarlo sobre el punto fatídico.

Se acercaba el final y la afición local empezaba a dar el empate por bueno. Pero ahí surgió Alba el luchador, que peleó un balón en el área contrincante, lo recuperó, se lo cedió a Berto y este marcó por bajo entre un defensa y el portero. ¡Qué explosión de júbilo! En zona mixta se mostraba muy satisfecho por su gol.

Una vez más parecía que Murphy se había instalado de nuevo en La Pixarra. Sin embargo, ayer la suerte cambió. Los jugadores lo agradecieron, pero la afición local lo celebró con un grandísimo alborozo. Por una vez en esta liga la suerte se aliaba con los nuestros. Fue una catarsis absolutamente necesaria. El partido fue superdispustado por parte de los dos equipos.

No quedaba nada, pero la intervención de cada partido de “taquicarlos” Tejada. Después de haber salvado el resultado con un 1 a 1 en el marcador, en los últimos segundos controla un balón con el pecho, que se le va y puso un nudo en la garganta de todos. Por suerte, solo fue una guinda para animar el final.

Menos mal que Murphy salió huyendo de La Pixarra ante el diluvio que caía sobre la capital del Principado.

Relee la alineación y descubrirás a trece grandísimos luchadores en unas condiciones dantescas.

Crónica de Jesús Manuel Prado Lafuente